FUNDRAISING FOR YOUR SUPPORT GROUP - English Version is available in Library Catalog

¿Ha oído hablar de la regla del 80/20? “El 20 por ciento de la población realizará el 80 por ciento del trabajo”. En otras palabras, el respaldo que se necesita de los voluntarios para que un programa de recaudación de fondos salga adelante ha de provenir de los miembros de un grupo de apoyo: esas personas entregadas, dispuestas a participar y sacrificar tiempo y energía para conseguir que prosperen los programas del grupo.

Pedir ayuda

¿Cómo se consigue que los miembros del grupo ayuden a recaudar fondos? El primer paso es exponer el proyecto en las reuniones del grupo. A continuación, no dude en llamar y pedirles que se hagan cargo del mismo. Solo porque el grupo vaya a comenzar un nuevo programa, no significa que todo el mundo vaya a saltar sobre las extremidades que les quedan y correr a ayudar. Es necesario insistir en que la participación de todos es crucial para que el esfuerzo dé resultados. Las personas deben saber que se las necesita y que su contribución es valiosa.

Otra forma de fomentar la participación es ofreciendo incentivos. Todo el mundo necesita que se le reconozca el esfuerzo realizado. Los vales de regalo, las placas de reconocimiento y los premios especiales son solo algunas de las muchas maneras de expresar la gratitud del grupo y motivar a los miembros a que trabajen un poco más. Gastar unos cuantos dólares en incentivos y asequibles regalos de agradecimiento puede conllevar grandes ganancias, al tiempo que incorpora un poco de diversión al proyecto.

Hay que recordar que quizás los nuevos miembros tengan opiniones e ideas originales. Puede que tengan ideas nuevas, creativas y/o innovadoras para promover nuevas actividades de marketing, publicidad o funcionamiento que sirvan para recaudar fondos. Las personas que participan por primera vez no se atascan ni piensan igual que quienes ya han hecho esto muchas veces. Una idea nueva vale su peso en oro.

Motivación

Una de las cosas más importantes que hay que recordar es la necesidad de elegir un proyecto en el que el grupo tenga fe. El proyecto debe ser algo en lo que los miembros estén dispuestos a invertir dinero. Si los miembros no están interesados, es poco probable que lo esté el público en general. Es difícil vender algo a familiares, amigos y a la comunidad en general cuando los mismos promotores carecen de entusiasmo y dinamismo. La confianza en un proyecto es contagiosa y vende. Otro ingrediente necesario es informar sobre los servicios que proporciona el grupo de apoyo. Los proyectos y eventos de recaudación de fondos son buenos para hacer publicidad de la contribución que el grupo hace a la comunidad.

Para conseguir que los miembros participen en la recaudación de fondos, pida que se ofrezcan voluntarios y acepten responsabilidades para algunas partes del proyecto. Los grupos unipersonales están muy bien pero nadie puede o debe tratar de hacerlo todo. Muchas veces nos parece que no es necesario ayudar porque creemos que todo está bajo control. Delegar tareas y responsabilidades hace que las cosas sean más fáciles para todos. Compartir el proyecto hace que éste sea divertido. Por el bienestar del grupo, haga hincapié en lo importante que es la participación de todo el mundo, fomente el compañerismo y potencie el sentido de la responsabilidad. Todos los miembros tienen la obligación de aceptar responsabilidades por la continuidad de los servicios del grupo, dedicar tiempo y esfuerzo cuando sea posible y ofrecer lo más valioso: sus opiniones e ideas. La cooperación es un deber.

El trabajo en equipo nos une y se suma a la satisfacción que se siente cuando los miembros participan en la organización. He aquí algunas de las actividades que organizan los grupos de apoyo de todo el país para recaudar fondos:

• Patrocinar un torneo de golf o evento deportivo.
• Organizar una barbacoa en verano. Pedir a los supermercados que donen carne, y a los miembros que traigan platillos.
• Cobrar la entrada.
• Organizar comidas donde cada persona aporte un plato, cenas con pizza o comida italiana, y cobrar la entrada.
• Organizar rifas (si es legal en su zona) con artículos caseros, i.e., colchas, pinturas y obras de arte.
• Vender espacio publicitario en sus hojas informativas.
• Pedir a los miembros, familiares y amigos que vacíen los sótanos, áticos y armarios y organicen ventas de garaje.
• Incluir tarjetas para realizar donaciones caritativas en sus hojas informativas y correspondencia.
• Organizar una subasta con objetos donados por empresas locales.
• Organizar ventas de comida casera varias veces al año.
• Organizar una feria protésica educativa (con conferenciantes, premios). Solicitar patrocinadores y donativos.
• Vender tarjetas de felicitación, libros de cocina, adornos hechos a mano, obras de arte o manualidades en fiestas como el día de Navidad, de Pascua o de San Valentín.
• Organizar una feria de artesanía con manualidades donadas.
• Colaborar con otras organizaciones en la recaudación de fondos, grupos de diabéticos y contra el cáncer, centros de vida independiente, grupos deportivos de discapacitados.
• Proporcionar entretenimiento: espectáculos de humor, exhibiciones de baile, pequeños grupos de teatro.
• Organizar un baile de golosinas, o una chocolatada, con postres de chocolate especiales.
• Los grupos con el estatus 503(c)3 pueden solicitar una Donación Global para el Desarrollo Comunitario, a través de la ciudad o el condado.

Por lo general, pueden encontrarse listados de instituciones locales en periódicos o bibliotecas.